Afectados del INTI exigen más que una “sobadita” de espalda

Jennifer Hrastoviak

Jesús Morón, habitante del Valle de Atamo y afectado por el decreto del INTI que declara 521 hectáreas de terrenos como “ociosas en incultas”, exige a las autoridades regionales y municipales que se avoquen junto con las 4mil 500 familias afectadas a servir de enlace en la solución de este conflicto.

Morón manifestó preocupación por la condición actual de todos los afectados ya que con este decreto los habitantes de estos terrenos pasan a ser ocupantes en vez de propietarios, aun cuando cuentan con la documentación respectiva.

Sostuvo que inmediatamente después de que se publicara este decreto se introdujo en el Tribunal Agrario de Monagas la nulidad de este acto administrativo, han pasado 5 meses y aún no han recibido respuesta.

“El Tribunal Agrario aún espera por la contestación del INTI y ya han pasado 5 meses, esto nos preocupa porque no sabemos cuando pueden aplicar este decreto y nos saquen de nuestras casas, vivimos en constante zozobra y no podemos dormir tranquilos”, expresó Morón.

Asimismo reiteró que aun cuando la Gobernación, el Consejo Legislativo, concejo municipal de Arismendi y Federación Campesina le expresaron su solidaridad con este caso, exigió una actuación más contundente de su parte.

“No queremos una actuación como la que hizo el alcalde encargado de Arismendi, Luis Díaz quien se ofreció a ayudarnos, dijo estar de la mano con el pueblo y manifestó estar al tanto que los terrenos de Guacuco no son para uso agrícola. Se fue a Caracas a hablar con el INTI y cuando regresó ofreció una rueda de prensa junto con la alcaldesa Marisel Velásquez diciendo que estaba de acuerdo con que se utilicen los terrenos de Guacuco para uso agrario, eso es una falta de respeto hacia nosotros”.
Morón indicó que espera que la nueva autoridad municipal que sea electa el 5 de diciembre luche por la defensa de los intereses de los asuntinos y trabaje de la mano con estas 4mil 500 familias afectadas del Valle de Atamo y Guacuco en recuperar la propiedad de sus terrenos.